Páginas

lunes, 20 de abril de 2015

Cortinas y sábanas

Tal fue el ardor de nuestros cuerpos
Que el fuego aún ilumina
Tu ventana.

Tal fue la pasión
Que entre tus paredes
Aún hay eco de gemidos

Tal fue mi presencia
Que se sigue recortando mi silueta
Contra la tenue luz de la madrugada.

O no.

No ilumino yo ya tu ventana.
Ni se escucha mi voz ahogada.
Ni es esa mi figura.

Ahora hacéis orgías.
Vosotros. Tú,
la otra, el paso del tiempo,
y el olvido.


No hay comentarios:

Publicar un comentario